La casa saca su encanto particular de la singularidad de su entorno arquitectónico.
Se encuentra dentro de un antiguo baglio, un típico patio rural siciliano cerrado con una gran puerta, en el centro del cual se encuentra un árbol de morera.
La casa tiene dos plantas y cubre unos 65 metros cuadrados. La entrada se abre a un gran comedor con una bonita cocina, cómoda y organizada. También en la planta baja se encuentra el dormitorio, amplio y luminoso, con dos grandes ventanales con vistas a un magnífico olivar. La cama doble (160 x 200) permite una tercera cama o cuna (ambas bajo petición). Al lado del dormitorio hay un baño con una ducha espaciosa y elegante.

Una escalera de piedra conduce al entrepiso donde se encuentra la sala de estar, que también se puede usar como un segundo dormitorio para 2/3 personas. Hay un sofá cama (140x 200) y espacio suficiente para una cama supletoria. Esta área conduce a una hermosa terraza (15 metros cuadrados) en los techos del baglio donde puede desayunar con el sol de la mañana, tomar el sol en la privacidad o disfrutar del fresco de la noche. La casa da al patio del baglio y en el espacio reservado frente a ella, puede relajarse en una tumbona o cenar a la luz de las velas.
La casa es el resultado de una reciente restauración con materiales reciclados, como piedras y barandas antiguas, y la elección de terracota hecha a mano para los pisos y vigas de castaño para los techos, le da un encanto particular. La casa tiene un sistema de calefacción que la hace cómoda incluso para una estadía de invierno. Perfecto para una pareja, para una familia de 3/4 personas, o para dos parejas.