Estuvimos en El Portal del Cerrato con motivo de una celebración familiar. La casa es muy acogedora y tiene todo lo necesario para hacer la estancia agradable. Los salones son estupendos, así como el enorme jardín con frutales y el hecho de que todas las habitaciones, bien decoradas, cuenten con baño. La cocina con isla central también es muy interesante. Aunque en el pueblo no hay mucho que hacer más allá de visitar la preciosa iglesia visigoda de San Juan de Baños, en las cercanías sí que hay múltiples destinos por visitar. Jose, el propietario, resolvió todas nuestras dudas y nos atendió amablemente. Alojamiento recomendable.