Este verano nos hemos alojado en la cas de los Agapanthus, dos adultos y un niño. La experiencia ha sido muy buena: la casa és confortable, totalmente equipada, tiene acceso a un jardín maravilloso, mucho mas grande de lo que muestran las fotos, con árboles frutales, plantas aromáticas, plantas autóctonas de Azores, y una piscina increíble. Ha sido un gran alivio como padres poder proporcionarle a nuestro hijo su rato de juego y esparcimiento, y un buen chapuzón al final de la jornada. La amabilidad de los anfitriones es remarcable, en especial de Maria Antonia, a quien agradecemos sus explicaciones, y su cordialidad. Aconsejamos esta casa por las razones indicadas, y porque además se encuentra bien situada, se puede ir andando hasta el centro.Un paraíso de tranquilidad cerca de todo, qué más se puede pedir?!